
CALIGRAMAS
La palabra caligrama procede del francés calligramme, y esta del griego kállos (belleza) y grammé (trazo, contorno) = figura bella. Por lo tanto un caligrama es el escrito, por lo general literario, donde la disposición tipográfica o caligráfica con su arreglo gráfico representan el contenido del texto. los caligramas existen desde los griegos, Apollinaire logró difundirlos con gran éxito En la modernidad se dio con las Vanguardias de principios del siglo XX y más concretamente con el cubismo literario y los posteriores Creacionismo y Ultraísmo; el poeta cubista francés Guillaume Apollinaire fue un famoso creador de caligramas. eso es del aligrama El parnasianismo es una escuela literaria de Francia, c. 1860, que favorece la perfección formal frente a los descuidos y al sentimentalismo excesivo del romanticismo. Los poetas de esta corriente cultivan "el arte por el arte" Los poetas de este grupo, que incluyen a Théophile Guatier, Leconte de Lisle y Théodore de Banville, rechazaban la sociedad de su tiempo y se refugiaban en lo antiguo, lo suntuario, lo exótico y lo aristocrático. En sus versos aparecen elementos de la mitología griega, los jardines franceses, las fuentes de mármol y los cisnes. lo q acabe de mandar es parnasianismo el término sinestesia,en literatura se refiere a la representación de una conexión de fuerte vínculo o enlace entre los diferentes sentidos. Los personajes se describen como experimentando una sinestesia. La sinestesia es la fusión de los sentidos. en literatura se refiere a la representación de una conexión de fuerte vínculo o enlace entre los diferentes sentidos. Los personajes se describen como experimentando una sinestesia. La sinestesia es la fusión de los sentidos.









SINESTESIA
Sinestesia es la unión o transposición de las sensaciones. En la psicología, es una condición neurológica que mezcla los sentidos. Por ejemplo, un sinestésico puede ver sonidos, saborear palabras u oír olores. Pero en la literatura se trata de atribuir a un objeto o idea sensaciones que no le corresponden, dado que dicho objeto no puede producir la sensación en cuestión. Es un recurso literario muy común en la literatura barroca y simbolista, así como en la poesía de algunos escritores de las generaciones del 98 y del 27.